Qué hacer durante el periodo de asentamiento cuando tu moto es nueva

Comprar una moto nueva es una de las experiencias más emocionantes para cualquier motociclista. Pero ese entusiasmo debe ir acompañado de cuidado y paciencia, sobre todo durante las primeras semanas de uso. Ese tiempo se conoce como periodo de asentamiento o ablande del motor, una etapa clave para garantizar la vida útil y el rendimiento óptimo de tu moto.

En este artículo te explicamos qué es el asentamiento, por qué es importante y qué debes hacer (y evitar) para cuidar correctamente tu nueva moto.

Qué es el periodo de asentamiento

El asentamiento es el proceso en el que las piezas internas del motor, como pistones, aros y cilindros, comienzan a adaptarse entre sí mediante el roce controlado.
Durante esta etapa, el metal se ajusta y se “sella” de manera correcta, asegurando que el motor funcione de forma estable y eficiente a largo plazo.

Si el asentamiento se hace mal (acelerones bruscos, sobrecalentamiento, falta de mantenimiento inicial), el motor puede perder compresión, aumentar el consumo de aceite y reducir su potencia con el tiempo.

Duración recomendada

Depende del fabricante, pero en la mayoría de motos lineales —como Ronco, Honda, Yamaha o KTM— el asentamiento dura entre 800 y 1,000 kilómetros.
Durante ese periodo, se deben seguir ciertas recomendaciones específicas de manejo y mantenimiento.

Consejos esenciales durante el asentamiento

1. Evita las altas revoluciones

Durante los primeros kilómetros, no lleves el motor al límite.
Mantén las revoluciones por debajo del 60 o 70 % del máximo, evitando aceleraciones bruscas y cambios de velocidad violentos.

2. Varía las velocidades

No conduzcas a una misma velocidad constante por mucho tiempo.
Alternar las revoluciones y las marchas ayuda a que el motor se asiente de manera uniforme en todas sus partes.

3. No transportes carga pesada

Durante el asentamiento, evita llevar acompañante o carga excesiva. El motor aún no está preparado para soportar esfuerzo adicional y puede sobrecalentarse.

4. Cuida los cambios de aceite

El primer cambio de aceite es uno de los más importantes.
Debe realizarse entre los 300 y 500 km, ya que el aceite inicial acumula pequeñas partículas metálicas del proceso de ajuste interno.
Después, sigue el plan de mantenimiento indicado en el manual (generalmente cada 1,000 o 2,000 km).

5. Evita mantener el motor encendido en vacío por mucho tiempo

Aunque parezca inofensivo, dejar la moto encendida sin moverse puede provocar sobrecalentamiento y desgaste irregular.

6. Revisa periódicamente tornillos y tuercas

Con las vibraciones naturales, algunas piezas pueden aflojarse ligeramente. Revisa la tornillería de plásticos, escape, posapiés y espejos.

7. Utiliza combustible de buena calidad

Evita las gasolinas de baja pureza o de dudosa procedencia. Un combustible limpio protege el sistema de inyección o carburador durante esta etapa delicada.

Qué no debes hacer

• No sobrepases los límites de velocidad recomendados por el fabricante.
• No exijas la moto en subidas prolongadas.
• No la laves con el motor caliente.
• No cambies el aceite por marcas o densidades no recomendadas.

Señales de un asentamiento correcto

Después de los primeros 1,000 km notarás que:

• El motor suena más suave.
• La aceleración es más fluida.
• El consumo de combustible se estabiliza.
• Las vibraciones disminuyen notablemente.

En ese punto, tu moto estará lista para exigencias más altas y viajes más largos.

Conclusión

El asentamiento no es un trámite ni una recomendación opcional: es la base para que tu moto te acompañe por años con el mismo rendimiento del primer día.
Dedicarle esos primeros 1,000 km con calma y responsabilidad puede marcar la diferencia entre un motor duradero y uno que se desgaste antes de tiempo.

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